La caries dental es una enfermedad en la que intervienen múltiples factores del propio paciente, los dientes, la saliva, la microbiota oral, y la dieta como factor externo. También pueden ser determinantes factores genéticos, biológicos o de la conducta del paciente.
Es una de las enfermedades bucales más comunes en el mundo, pudiendo afectar a niños, jóvenes o adultos.
La caries es un tipo de infección producida por las bacterias que se acumulan en la superficie del esmalte, donde producen ácidos que desmineralizan la superficie de éste y lo disgregan. Una vez que se produce este daño, evoluciona hacia áreas más internas del diente afectando a la dentina e incluso a la pulpa. Si el proceso no se detiene el diente puede quedar totalmente destruido.
Podemos interrumpir el proceso de la caries eliminandola y sustituyendo la parte destruida, recuperando así totalmente la forma y función del diente. Este procedimiento se conoce como obturación, comúnmente llamado empaste.
Si el paciente es susceptible de tener caries es importante realizar controles periódicos la clínica, mantener una buena higiene dental y utilizar enjuagues de flúor.